El Frente Polisario responde a Macron: «El futuro del Sáhara Occidental lo decide su pueblo, no Francia»
● El cambio de rumbo de Francia, que pasa a apoyar la solución marroquí para la descolonización del Sáhara Occidental. Ha recibido la respuesta del Frente Polisario que les acusa de «excluirse de los esfuerzos internacionales para descolonizar el Sáhara Occidental».
ECS | EFE
El Frente Polisario recordó este martes, con respecto al giro de Francia de pasar a apoyar abiertamente el plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara Occidental, que es «el pueblo saharaui, no Francia o cualquier otro país, quien decide el presente y futuro del Sáhara Occidental».
En una declaración del embajador del Polisario ante la ONU, Sidi Mohamed Omar, recordó que «ni Francia ni Marruecos pueden doblegar la voluntad del pueblo saharaui», y prometió que este seguirá luchando por su independencia «por todos los medios legítimos».
Para Omar, la postura de Francia es contraria al derecho internacional, y más en concreto a sus obligaciones como miembro permanente del Consejo de Seguridad, ya que pasa a apoyar abiertamente «la ocupación ilegal del Sáhara Occidental cuando es un territorio pendiente de descolonización».
Con el paso dado hoy por el presidente Emmanuel Macron en favor de Marruecos, al declarar el plan de autonomía para el Sáhara como «única base» para resolver ese conflicto, Francia «se ha excluido de los esfuerzos internacionales para descolonizar el Sáhara Occidental», concluyó Omar.
Con sus declaraciones, Omar alude al hecho de que el conflicto del Sáhara Occidental entra dentro de las competencias del Consejo de Seguridad, que anualmente renueva la misión de la ONU en el territorio, llegada en 1991 para organizar teóricamente un referéndum y que ahora se limita a vigilar un alto el fuego roto por el Polisario en 2020 con una guerra de baja intensidad.
En el seno del Consejo, Francia siempre ha defendido discretamente los intereses marroquíes, sin contar con la oposición clara de ninguna otra potencia, y con el paso de los años las resoluciones del Consejo se van escorando poco a poco hacia las tesis marroquíes. El giro dado hoy por Francia ha tenido ya otros efectos diplomáticos: hoy mismo, Argel, gran valedor internacional del Frente Polisario, anunció que retiraba a su embajador en París con efecto inmediato.
Marruecos anuncia el apoyo de Francia a su plan de autonomía sobre el Sáhara Occidental
Madrid (ECS).- Francia da un giro y apoya la ocupación militar marroquí del Sáhara Occidental. El Presidente francés, Emmanuel Macron, apoya, según Marruecos, el plan de autonomía marroquí presentado en 2007 para el Sáhara Occidental considerando que es «la única base para alcanzar una solución justa, duradera y negociada».
Argelia condena postura de Francia sobre el Sáhara Occidental
Con esta decisión, Macron se suma a Pedro Sánchez y Donald Trump al tomar partido por Rabat en el conflicto saharaui. El apoyo de Francia a la ocupación marroquí de la antigua colonia española no es nada relevante por el hecho de que París apoyó de forma directa la ocupación del Sáhara Occidental desde 1975, y participó en la guerra del Sáhara Occidental (1975 – 1991).
El anuncio francés sigue al que hizo Pedro Sánchez de España, en parecidos términos, en el 2022, después de decenios de una neutralidad obligada por su condición de antigua potencia colonial en el Sáhara Occidental, y de la misma actitud que adoptó Donald Trump.
Macron ha enviado una carta al rey de Marruecos, Mohamed VI, en la que expresa que el plan de Rabat de una autonomía para el Sáhara Occidental “es la única base para lograr una solución política, justa, sostenible y negociada” al conflicto que se prolonga desde hace medio siglo.
Crisis con Argelia
El paso dado por Macron tiene un coste geopolítico evidente para Francia porque complica todavía más la difícil relación que mantiene con Argelia, colonia francesa desde 1830 y que logró su independencia en 1962 después de ocho años de una guerra cuyo trauma todavía se arrastra.
La misiva al rey marroquí coincide con su ascenso al trono hace 25 años. El regalo diplomático es de un gran valor, puesto que en el mensaje se afirma que “para Francia, la autonomía bajo soberanía marroquí es el cuadro en el que la cuestión debe ser resuelta”. “Nuestro apoyo al plan de autonomía propuesto por Marruecos en el 2007 es claro y constante”, añade la misiva.
Anticipándose a una decisión francesa inminente y de la que había sido informada con antelación, Argelia mostró su profunda desaprobación y consideró que la declaración era “inoportuna y contraproductiva”, y que no ayudaba a la resolución pacífica del contencioso. Argel amenazó con “sacar todas las consecuencias que se derivan de la decisión francesa”. La réplica por parte del Frente POLISARIO no puede ser otra: «Francia apoya la ocupación violenta e ilegal del Sahara occidental.»
Para el Frente POLISARIO, la nueva postura de Francia tiene peso y tendrá sus efectos, aunque no afecta de ningún modo el derecho inalienable del pueblo saharaui a la autodeterminación, ni suspenderá ni borrará la presencia del Sáhara Occidental de la lista de regiones cuyo destino aún no está decidido: del cual no se ha completado la descolonización. «A esto se suma que Marruecos, en la etapa actual, ha vuelto a cobrar importancia geopolítica, y los cambios en la región del Sahel le han otorgado especial importancia, dado que sirve de punta de lanza para Occidente, especialmente Francia, y un puente para Occidente. además, como si fuera el Marruecos de los años setenta del siglo pasado: el gendarme del noroeste de África», reconoce un alto diplomático saharaui en declaraciones a ECSaharaui.
El gobierno saharaui condena postura de Francia y afirma que le excluye de todo lo relacionado con los esfuerzos internacionales en torno al Sáhara Occidental
Bir Lahlou (República Saharaui) – El gobierno de la República Saharaui expresó su enérgica condena a la nueva decisión del gobierno francés hacia el pueblo saharaui y su derecho inalienable a la libertad, la independencia y la autodeterminación, calificándola de “hostil”.
Gobierno de Argelia ha anunciado este miércoles que Francia le ha trasladado recientemente su decisión de apoyar el plan de autonomía marroquí para Sáhara Occidental. Por su parte, Argel ha criticado duramente lo que describió como una postura «contraproducente e «inoportuna». «El Gobierno argelino ha tomado nota con gran pesar y profunda desaprobación de la decisión inesperada, inoportuna y contraproducente del Gobierno francés de apoyar inequívoca e incondicionalmente el plan de autonomía del Sáhara Occidental en el marco de la soberanía marroquí», ha señalado el Ministerio de Exteriores argelino en un comunicado.
El Gobierno saharaui destacó, en su comunicado publicado viernes, «que esta decisión (el apoyo francés a la ocupación marroquí), que constituye una peligrosa escalada, tendrá graves consecuencias para la paz, la seguridad y la estabilidad en toda la región».
Argelia condena postura de Francia sobre el Sáhara Occidental
«El pueblo saharaui nunca olvidará el pasado colonial de Francia y su participación directa en los intentos de exterminio desde principios del siglo pasado y a mediados de los años cincuenta y setenta del mismo siglo», reza el comunicado.
El Gobierno saharaui afirmó, en el mismo comunicado, que “para confirmar que” la adopción por parte de Francia de esta postura hostil la excluye completamente de todo lo relacionado con los esfuerzos internacionales relacionados con la descolonización del Sáhara Occidental, sino que la sitúa en la categoría de ocupante y lo convierte en una parte indeseable para los saharauis, incluida su participación en la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO).
La opinión consultiva de la CIJ sobre Palestina «se aplica plenamente al Sáhara Occidental» (Dr. Sidi Omar)
APS
NUEVA YORK – Las conclusiones de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en su reciente opinión consultiva sobre las consecuencias jurídicas de las políticas y prácticas de Israel en los territorios palestinos ocupados, incluido El Quds-Este, «se aplican plenamente al Sáhara Occidental», un territorio ocupado por la fuerza y cuyo pueblo está privado del ejercicio de su derecho a la autodeterminación, que es, sin embargo, una norma imperativa del derecho internacional», argumentó el representante del Frente Polisario ante la ONU y coordinador con la Minurso, Dr. Sidi Mohamed Omar.
Los palestinos lamentan que Marruecos apoye a Israel en las masacres de Gaza
«La reciente opinión consultiva de la CIJ constituye un importante paso jurídico para la cuestión palestina. Su importancia también reside en el hecho de que incluye un conjunto de conclusiones jurídicas que se aplican perfectamente al Sáhara Occidental, territorio también ocupado por la fuerza, y su pueblo está privado de su derecho a la autodeterminación, que es una norma imperativa del derecho internacional, como lo confirma la propia CIJ», subrayó el diplomático saharaui en una entrevista con APS.
Según el representante del Frente Polisario en la ONU, la reciente opinión consultiva de la CIJ sobre Palestina y los dictámenes jurídicos anteriores emitidos por organismos judiciales internacionales y continentales «apoyan los argumentos jurídicos del pueblo saharaui en su lucha por conseguir sus legítimos derechos» a la libre determinación, la independencia y el ejercicio de la soberanía permanente sobre sus recursos naturales.
«Los baúles del retorno saharaui», había baúles, pero no hubo retorno al Sáhara Occidental
El coordinador del Frente Polisario con MINURSO también consideró «imposible» avanzar en el proceso de paz en el Sáhara Occidental si no se ejerce presión sobre el ocupante marroquí para obligarlo a comprometerse con la comunidad internacional. Sin embargo, el enviado personal del Secretario General de la ONU, Staffan de Mistura, decidió romper el actual estancamiento.
«En su última reunión con el Consejo de Seguridad, el pasado mes de abril, el enviado personal del Secretario General de las Naciones Unidas para el Sáhara Occidental, Sr. Staffan de Mistura, expresó su deseo de redoblar esfuerzos para reactivar el proceso de paz con el fin de retomar el diálogo con ambas partes. Creo que es prácticamente imposible esperar algún progreso en el proceso de paz a menos que el Estado ocupante marroquí se vea obligado a participar de forma seria y responsable en el Plan de Arreglo«, subrayó Sidi Omar.
«Esto nunca podrá conducir a una paz justa y duradera, como lo demuestran, por ejemplo, los recientes acontecimientos en Oriente Medio», añadió, reafirmando la disponibilidad del Frente Polisario a «cooperar con los esfuerzos de la ONU y de la Unión Africana para lograr una solución pacífica y duradera al conflicto entre la República Saharaui y el Reino de Marruecos de conformidad con la legalidad internacional y los objetivos y principios del acto constitutivo de la Unión Africana.
Incapacidad de Minurso para cumplir su misión
El diplomático saharaui deploró, además, la incapacidad de la Misión de las Naciones Unidas para la organización de un referéndum en el Sáhara Occidental (Minurso) de cumplir su misión, explicando qur este fracaso viene por «la falta de voluntad política por parte de Marruecos, que pone obstáculos para la celebración del referéndum».
La razón que explica la no organización de este referéndum reside en el hecho de que «el Consejo de Seguridad no logró, debido a la influencia de algunos de sus miembros permanentes, responder con firmeza a los obstáculos planteados por Marruecos y a garantizar la plena implementación del mandato de la Minurso«.
Guerra del Sáhara Occidental | La estrategia saharaui pasa por una apuesta por el desgaste marroquí
“Por mucho que el ocupante marroquí intensifique su política agresiva y por muchas alianzas nuevas o antiguas de las que dependa, el pueblo saharaui cree en la justicia de su causa y se aferra firmemente a sus derechos inalienables, no negociables e imprescriptibles, en particular a la autodeterminación y la independencia”, recalca Sidi Omar.
Para el representante del Frente Polisario en la ONU, la inclusión del Sáhara Occidental en la lista de territorios no autónomos de las Naciones Unidas desde 1963 confirma el carácter internacional de la cuestión saharaui como una cuestión de descolonización de acuerdo con el capítulo once del Convenio Carta de las Naciones Unidas y el consiguiente reconocimiento internacional.
“Sobre esta base, el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y a la independencia es un derecho inalienable e imprescriptible, y nadie, sea quien sea, puede arrebatárselo al pueblo saharaui porque es un derecho adquirido por el pueblo saharaui de la lucha, la resistencia y los sacrificios de nuestro pueblo decidido a existir libre y soberanamente en su tierra y a defender sus derechos y sus aspiraciones nacionales por todos los medios legítimos”, concluyó.
Guerra del Sáhara Occidental | La estrategia saharaui pasa por una apuesta por el desgaste marroquí
Por Salem Mohamed
ECS. Tifariti. | La independencia de un país no se obtiene en una sala de la ONU u otra, sino sobre la base de lo que sucede en el terreno. Este irrestricto principio está avalado por un bagaje de sucesos históricos difícilmente rebatibles. Desde el alto el fuego de 1991, en tres décadas de moderación y exhibición diplomática, el Frente POLISARIO solo ha ganado fuerza teórica a través de reiterativas resoluciones que no condujeron a nada concreto, mientras que por el otro lado perdía considerable apoyo diplomático vinculado en su mayor medida a acuerdos económicos en los territorios ocupados. Y dada la manifiesta negligencia y macabra imparcialidad de la ONU en celebrar un referéndum reconocido y prometido desde décadas, y nunca ejercido por el pueblo que confió en las instituciones internacionales, no queda otra vía sino la de recrudecer la lucha armada ampliando el campo de batalla y reorientando el objetivo hacia el tejido de la »economía de colonización» y las infraestructuras críticas que sostienen la ocupación marroquí de la República Saharaui y financian su vil agresión contra nuestro pueblo.
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En el análisis del escenario de la vigente ocupación marroquí de partes de la República Saharaui, identificamos aquellas fuerzas motrices que condicionan el presente y son susceptibles de dar forma al futuro e influir en el curso de los acontecimientos en un conflicto marcado por el pillaje colonial; el expolio de recursos naturales saharauis (pesca, fosfatos, agricultura y energías renovables) y la apertura de nuevas rutas comerciales marítimas y terrestres de alto valor estratégico (Dakhla Atlantique y El Guerguerat), constituyen el núcleo esencial de la presencia militar marroquí y en consecuencia los verdaderos game changers, su observación nos permite anticipar el futuro a partir del presente.
Dichas explotaciones ilegítimas, en tanto que son elementos objetivos que sirven para perpetuar la ocupación marroquí, se convierten automáticamente en objetivos legítimos de la lucha armada del pueblo saharaui por liberarse. Se trata pues, de generar las condiciones favorables para provocar la inviabilidad de la guerra para Marruecos así como la insostenibilidad del mantenimiento de su presencia militar a través de la generación de costes, poniendo de esta manera en jaque a su economía y estabilidad interna ya afectadas por las circunstancias políticas y económicas actuales por las que atraviesa el régimen alauí, algo que sin ninguna duda reviste una importante ventaja para el Frente POLISARIO, ofreciendo un marco idóneo para apuntalar la guerra de desgaste, siempre desde la razón y asumiendo la complejidad que requiere dicha tarea en un contexto de incertidumbre bélica con consecuencias imprevistas y potencialmente desfavorables.
Generación de costes:
Es importante recordar que para Marruecos es económicamente ineficiente hacer la guerra; mantiene tres cuartas partes de su ejército en la región que ocupa con los correspondientes gastos de transporte y mantenimiento, y sus acciones se limitan a esporádicos ataque con drones, diez veces más costosos que el objetivo atacado.
Los años de la primera guerra, la paz con Mauritania y el desgaste causado a Marruecos durante dieciséis años dejaron una valiosa experiencia operativa, especialmente para nuestros mandos medios y superiores, que son quienes conducen las operaciones de hoy día en una guerra asimétrica en la que la acumulación de costes para el enemigo deberá emerger como la opción más conveniente para lograr doblegar al esquema de ocupación marroquí, cuya fuerza militar es superior a las fuerzas armadas de la RASD, aunque conviene diferenciar entre poder militar efectivo y capacidad demostrada. El potencial de las fuerzas saharauis solo está limitado por los medios materiales, por lo que aplicando la inteligencia táctica, el ELPS podrá imponer la disuasión y cambiar las reglas del juego si golpea enclaves y emplazamientos cruciales.
Todas las guerras van de costes; coste social, económico, político y diplomático, de los cuales los que mayor relevancia adquieren son los tres últimos. Sale victorioso por tanto aquel que más costes soporta en un periodo de tiempo extendido sin afectar sus capacidades. En el presente artículo nos centraremos en el aspecto económico ya que, en el caso marroquí, es el que sustenta los demás costes y contiene el peso necesario para desequilibrar la balanza a favor de los saharauis por lo anteriormente mencionado, en un contexto en el que la vía diplomática ha quedado estancada. Contrariamente a lo que se cree, el Ejército de Liberación Saharaui mantiene ininterrumpidos sus ataques contra el muro marroquí desde el 13 de Noviembre de 2020, controlando el curso, la intensidad y localización de la guerra con armas clásicas y convencionales, e infringiendo costes todos los días. Recuérdese que Marruecos, en la primera guerra de liberación (1975-1991), a los cuatro años de su inicio ya comenzaba a quejarse del desgaste »que le impone el Frente POLISARIO».
Asimismo, la ofensiva legal del Frente POLISARIO defendiendo los recursos naturales saharauis, que espera una sentencia de la Corte Europea a finales de este año, a todas luces favorable, afectará el comercio, divisa y PIB marroquí al alterar la llamada »economía de colonización», y no menos importante es la crisis energética en la que está hundido desde que Argelia le cerró el gasoducto y le declaró la guerra económica con una estrategia »a fuego lento» que pasa por esperar a que Rabat se desangre económicamente comprando GNL.
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Y así está sucediendo; aún careciendo de infraestructuras para regasificar el GNL, Marruecos se vió obligado a acceder por primera vez al mercado del GNL, reabriendo para ello sus dos plantas de Tahaddart y Ain Beni Mathar, pero las noticias buenas duraron poco, pues el aumento de la demanda de GNL liderado por una Europa sedienta de energía tras renunciar a la energía rusa, aumentó aún más los precios del gas y por ende, más inflación, lo que afectará el acceso de Marruecos a esta fuente de energía. Por lo que el escenario es el siguiente: en un contexto de frenética carrera por alternativas a la energía rusa, Marruecos comenzará a pagar más caro por el gas que recibía gratis estos últimos 25 años gracias a Argelia llevándose incluso un suculento beneficio por derechos de paso. Así Rabat, en tan solo un año, ha perdido su soberanía energética, que queda a merced de las implacables leyes de la oferta y la demanda y otras variables geopolíticas y diplomáticas que está sufriendo una UE políticamente miope.
Implicaciones estratégicas de El Guerguerat:
Desde el 2001 Marruecos miraba de reojo esta zona tampón por la que circulaban mercancías ilegales. En 2005 asfaltó la carretera en las zonas saharauis ocupadas y la dotó de un edificio de aduanas. En 2017, tras acceder a la Unión Africana, intentó concluir el asfaltado e invadir más territorio pero por el temor al regreso de hostilidades y buscando ganarse el favor de Guterres, acabó retirando sus tropas. Tres años después, en Noviembre de 2020, lanzó una operación militar violando los acuerdos del alto el fuego con el Frente POLISARIO, invadiendo la zona y construyendo un nuevo muro infestado de minas, dando lugar al consecuente restallido de guerra, pero, ¿qué tiene de importante esta zona por la que Marruecos se atrevió decididamente a romper los acuerdos militares Nº1 y Nº2 firmados en 1991 con la ONU y el Frente POLISARIO?
Geográficamente, Marruecos se encuentra aislado del África Occidental por sus dos rivales, Argelia al este, que mantiene cerrada sus fronteras compartidas, y la República Saharaui al sur, que mantiene ocupada militarmente, por lo que carece de ningún paso o conexión terrestre hacia dicha región. En el contexto de la ocupación, El Guerguerat era estratégica para los saharauis, hasta 2020, porque era la única salida al Atlántico y hacia la ciudad fantasma de La Güera, así como por la cercanía con la capital económica de Mauritania, Nuadibú. En tanto es así, la ilegal anexión marroquí con la posterior construcción de un nuevo muro y bases militares en El Guerguerat tiene un significado eminentemente económico; Otorga a Marruecos el anhelado acceso al mercado del CEDEAO del que ya forma parte su gran rival, Argelia, que sí comparte frontera natural con Mauritania y poseen ruta terrestre. Rabat es consciente de que el acceso al mercado del CEDEAO solo puede ser posible anexándose la brecha ilegal de El Guerguerat, paso fronterizo que conecta con Mauritania a través del punto PK-55, que se encuentra en el extremo sur de los territorios de la República Saharaui, por tanto es la única vía del territorio que le permitiría comercializar sus productos con los países del África Occidental y del Sahel, y competir así con las rutas argelino-mauritanas como Tinduf-Zuérat y Nuakchott-Uargla.
Por supuesto, la energía, el petróleo y el gas, así como otras importaciones, son extremadamente importantes para las principales industrias de la ‘’economía de colonización’’ y muy especialmente para el mantenimiento de su ejército de ocupación en su guerra de agresión contra el pueblo saharaui. ¿Podrá Marruecos costear simultáneamente el mantenimiento de su población de 36 millones de habitantes y cargar con los gastos de una guerra prolongada así como de las subvenciones millonarias que inyectan en las zonas ocupadas del Sáhara Occidental a costa de gravar al contribuyente marroquí?
Por su parte, los países que conforman el bloque comercial, liderados por la potencia regional; Nigeria, no ven con buenos ojos el acceso de Marruecos al CEDEAO, ya que temen que supondrá una vía libre »caballo de troya» para introducir productos europeos y estadounidenses sin pasar por los aranceles propios del grupo comercial regional y por otro lado, muchos de los miembros reconocen a la República Saharaui. La proposición de Rabat de unirse al CEDEAO fue calificada por la patronal nigeriana como »ambigua» además de señalar que es altamente lesiva para los intereses económicos de Nigeria. Hasta el momento, la petición marroquí de unirse al CEDEAO sigue en el limbo cuatro después de solicitarse.
Es igualmente importante señalar que la operatividad y libre tráfico de este paso fronterizo producto del expansionismo por la fuerza militar ha sido posible mediante la inexplicable complicidad de las autoridades mauritanas, que pese a que reconocen la República Saharaui, violan su integridad territorial con impunidad pasmosa en un acto que echa por tierra su supuesta neutralidad meramente declaratoria.
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Contexto actual de la brecha ilegal de El Guerguerat:
Se trata de la única carretera terrestre que conecta Marruecos a través de la República Saharaui y Mauritania con las profundidades del África Occidental, evitando además grandes costes en transportes marítimos al facilitar una ruta terrestre directa desde el puerto mediterráneo de Tánger hasta Dakar. Rabat logra sortear así su encapsulamiento geográfico por décadas y refuerza su ocupación del Sáhara Occidental al convertir la brecha de El Guerguerat en condición indispensable y razón de existencia de dicha ruta.
Actualmente, del paso fronterizo ilegal de El Guerguerat depende gran parte del comercio UE-África ya que Marruecos es el principal socio comercial de la UE en la región norteafricana, además mantiene a Nuakchott dependiente de la ruta por la gran exportación de hortalizas, insumos de primera necesidad y material electrónico que recibe. En el mismo sentido, para mantener a Mauritania alejada de cualquier posicionamiento a favor de la República Saharaui, amenaza continuamente con invadir La Güera con la finalidad de construir un puerto marítimo que haga competencia al puerto de Nuadibú, ciudad mauritana portuaria de mayor actividad. Marruecos, en sus ambiciones expansionistas, persigue hacerse con el control de gran parte de la zona marítima del Atlántico oriental.
Los continuos bombardeos marroquíes efectuados en la frontera norte entre la República Saharaui, Mauritania y Argelia contra civiles y convoys comerciales (a fecha de escribir este artículo se han contabilizado 27 ataques con drones en estos últimos dos años), siguen la estela de consolidar su presencia en este paso fronterizo y hegemonizar la ruta Tánger-Dakar implantando el terror en la citada zona de triple frontera para desalentar a pasajeros y comerciantes que utilizan las competidoras rutas de Tinduf-Zuérat y Nuakchott-Uargla, y en consecuencia, forzar su inoperatividad y canalizar la mercancía.
Recientemente, el presidente mauritano, Mohamed Ould Ghazouani, anunció el inicio del último tramo de las obras de la ruta Tidjikja-Boumdeid que unirá Argelia con Bamako a través del territorio mauritano conectando con la ruta Tinduf-Zuérat, en un paso para deshacerse de la dependencia marroquí y unir el sur con el norte del país al superar las barreras geográficas. A su vez, éste último tramo se une a una vía de 342 kilómetros que une Mauritania, Mali y Senegal. Por lo tanto, éste tramo ayudará a Nuakchott a reactivar la economía del país, sobre todo porque conectará las ciudades del norte y del sur, completará la conexión de la red de carreteras que se extiende desde la ciudad de Zuérat hasta el extremo norte, contribuirá al desarrollo de la producción y permitirá la complementariedad del Magreb a través del eje Tidjikja-Atar-Zuérat y Tinduf pero también con África a través del otro eje Sélibabi-Bamako, que facilitará el comercio y el transporte de mercancías. Se espera que esto ayude a Mauritania a abandonar la dependencia de Rabat y a posicionarse con contundencia en el conflicto saharaui.
El estado de confusión de Marruecos:
Marruecos pone el grito en el cielo por los posibles drones que adquirirá el Frente POLISARIO mientras se arma con los de Israel y Turquía, luego, ¿lo que es legal para Marruecos no lo es para los demás? El pasado mes de Octubre, Marruecos, a través de su representante permanente en la ONU, Omar Hilale, amenazó con que si el Frente POLISARIO adquiere drones y los utiliza, invadirá el resto del territorio saharaui. Una amenaza poco creíble dadas las consecuencias militares y políticas que desencadenaría al amenazar la existencia del estado saharaui por un lado, y por otro lado, porque es sencillamente una declaración impulsada bajo la presión del miedo a lo desconocido, pues fue el mismo Rabat el que se quejó el año pasado a la ONU de que el Frente POLISARIO había efectuado 724 operaciones con drones contra el muro militar en la región de Mahbes y Hauza, sin embargo no hubo por entonces una »respuesta militar adecuada» salvo bombardeos indiscriminados contra civiles y convoys mercantes que cruzan el paso hacia y desde Mauritania y Argelia.
Aquel que es reconocido por dos resoluciones de la ONU como fuerza ocupante ilegal del Sáhara Occidental, cuyos drones han asesinado ciudadanos de todos sus vecinos, acusa de terrorismo a un movimiento de liberación nacional reconocido por la ONU que ejerce su legítimo derecho a la defensa, mientras olvida su apoyo a grupos terroristas como DAESH, AQMI (JNIM) y su turbia relación con los terroristas del 11-M de Madrid.
Aquel que suplica que Argelia debe participar en las negociaciones en formato de mesas redondas como parte del conflicto por su invariable papel de apoyo al pueblo saharaui, olvida que el Frente POLISARIO, bajo la misma premisa, podría exigir también la participación de Francia, España o de EE.UU por su declarado apoyo y esfuerzos en el mantenimiento de una anexión ilegal. Aquel que se queja del gasto que hace Argelia al financiar al Frente POLISARIO definiéndolo como »promover un conflicto artificial», olvida que gasta cinco veces más solamente por el coste de las operaciones militares y el mantenimiento de decenas de miles de soldados de las FAR en el muro militar en la región que mantiene anexada, sin contar la »diplomacia del maletín» y las operaciones de influencia mediática.
Pese a la opacidad del régimen marroquí, las estadísticas del Tesoro marroquí reflejan un considerable gasto en el Sáhara Occidental ocupado: desde 1978 hasta 1992, Rabat destinó casi dos mil millones de dólares a las zonas ocupadas, acaparando la operación de PhosBucraa el grueso del gasto. En el mismo contexto, durante el periodo de pleno apogeo de guerra (1985-1991) las cifras estimaban un desfalco de 1 millón de $ por cada día. Este continuo goteo millonario para el mantenimiento de una invasión militar ilegal ha ido en ascenso en la medida que aumentaba la población, si bien los gastos militares se redujeron desde el alto el fuego de 1991, éste en cambio supuso el pistoletazo de salida a inversiones en infraestructuras de dudosa rentabilidad y legalidad. De nuevo en 2020 con el restallido de guerra, el gasto militar crece considerablemente; en el 2021 incrementó en un 30% y en el 2022 efectuó la mayor inversión militar en su historia (4.800 millones de $). Un gasto militar completamente incompatible con su PIB y con su renta pér cápita que nos obliga a preguntarnos si Marruecos se está armando o lo están rearmando. En cualquier caso, la carrera armamentística será incapaz de soportarla en el largo plazo.
Costes, costes y más costes:
Como se puede apreciar, en tan solo dos años desde el estallido de guerra, se ha zarandeado el mapa Magreb y muy particularmente, la economía marroquí, por lo tanto cabe preguntarse, ¿qué será de esa economía si le añadimos el cese de la actividad extractiva en la mina de Bucraa y la desinversión generalizada de energías renovables en los territorios ocupados por tratarse de una zona de guerra?
Al hilo de lo anterior, sabiendo de las intenciones de Marruecos desde hace años, para el Frente POLISARIO el solo hecho de haber mantenido una tensión bélica en el sur del territorio, hubiera disuadido a inversores extranjeros en busca de minerales o el establecimiento de rutas comerciales efectivas y seguras como la de El Guerguerat. Mientras Argelia y Mauritania excluyen a Marruecos de las rutas transaharianas y norteafricanas para desbaratar la artimaña ilegal de El Guerguerat, la RASD no lleva a cabo acciones militares en esta zona desde Enero de 2021, por entonces cuatro misiles tierra-aire lanzados por el ELPS el 21 de Enero paralizaron la actividad del paso fronterizo ilegal y cortaron el suministro eléctrico temporalmente.
Cabe destacar que la artificial e ilegal ruta marroquí en El Guerguerat se encuentra en una zona de guerra abierta a cualquier eventualidad. Si la manifestación pacífica de ciudadanos saharauis que logró bloquear la carretera de El Guerguerat durante 24 días provocó pérdidas millonarias a Marruecos obligándole a desviar buques y camiones al puerto de Dajla ocupada, ¿De cuántas pérdidas estaríamos hablando si la paralización de la actividad mercantil y aduanera de la brecha, que se ha convertido en interés vital para Rabat, fuera indefinido?
¿Qué será de esa economía si le añadimos el cese de la actividad extractiva en la mina de Bucraa y la desinversión generalizada de energías renovables en los territorios ocupados por tratarse de una zona de guerra? ¿Y si a eso le añadimos la destrucción de los nodos logísticos y de aprovisionamiento de la base militar marroquí de Bir Enzarán, la más grande en la región sur y verdadera central de suministros?
En vista del atolladero diplomático y la irracional intransigencia del régimen marroquí, solamente la guerra podrá hacerlo claudicar para que vuelva a mirar hacia su interior y reoriente sus energías hacia la construcción de su sueño de grandeza dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas, un sueño que no signifique una tragedia para otros, concretamente para el pueblo saharaui, que paga un alto precio desde hace cuatro décadas. Su aspiración a una mayor relación con la Unión Europea, a ser una potencia regional dentro de la Unión Africana, exige un gran proyecto económico y social.
Hacerle entender a Marruecos, en línea con el espíritu y marco de la propuesta de resolución del Frente POLISARIO de 2007, que solamente a través del reconocimiento y respeto a la integridad territorial, garantías de seguridad y cooperación económica con la RASD, es la vía pacífica más beneficiosa para facilitar la ruptura con su empeño en mantener el territorio ocupado.
Marruecos y el fin del saqueo económico del Sáhara Occidental; claves para desbloquear el conflicto
Por Ali Mohamed y Lemhamid Sidi
ECS. Madrid. | El régimen marroquí, vive una crisis estructural sin precedentes, pues jamás durante el reinado de Mohamed VI el país magrebí había acumulado tantos contratiempos simultáneamente, que no hacen sino agudizar su situación; crisis política, social y económica, grave sequía, guerra en el Sáhara Occidental, desavenencias en el Palacio Real, ruptura con Argelia y un rey que gobierna desde la distancia ajeno a la realidad de su Reino. Este peligroso cóctel que puede llevar a Rabat a precipitarse para imponer, por la fuerza, un nuevo statu quo en el Sáhara Occidental.
Marruecos, que justifica su ocupación del Sáhara Occidental con un relato que no tiene otro sentido que el de apropiarse de la riqueza de un territorio que no le pertenece, que nunca le ha pertenecido y que tarde o temprano perderá. Cualquier guerra que genere dinero para costearla proporciona una razón importante para la consecución de la victoria, pero si los gastos de la guerra provocan el debilitamiento de quienes la libran con la consecuente erosión de su economía, éstos pueden ser derrotados e incluso ser arrastrados a la rendición. Por lo que la acumulación de costes es la dirección correcta y el objetivo que la guerra de liberación debe alcanzar en su fase actual.
Marruecos se aferra a la ocupación: el Sáhara Occidental y la necesidad de una reparación histórica
La energía: solar, eólica, el petróleo y el gas, la agricultura y la pesca son elementos extremadamente importantes y esenciales para el mantenimiento de la anexión y del ejército de ocupación, por lo tanto, si son elementos objetivos que sirven para perpetuar la ocupación marroquí, se convierten automáticamente en objetivos legítimos de la lucha armada del pueblo saharaui tal y como lo son en la batalla jurídica. Pero antes, echemos un vistazo más de cerca de lo que se trata éste robo sistemático de bienes y recursos saharauis, que reproduce una diabólica retroalimentación entre ocupación y beneficios económicos, para tener claro que solamente la erradicación del componente económico de la invasión ilegal del Sáhara Occidental hará ceder al régimen marroquí.
Energía: el Talón de Aquiles de la ocupación
Las dos principales empresas exportadoras de petróleo de Marruecos son Cepsa y Repsol, multinacionales españolas. Casi medio millón de toneladas de productos derivados del petróleo se desembarcaron en los puertos ocupados de El Aaiún y Dakhla. Los productos derivados del petróleo son esenciales para que Marruecos mantenga su ocupación del territorio y se utilizan principalmente como combustible para vehículos, motores y cargueros que participan en el saqueo del territorio saharaui, o son utilizados con fines militares por el ejército invasor marroquí. Estos transportes los realizan principalmente dos navieras, Wisby Tankers, empresa sueca cuyos petroleros enarbolan pabellón noruego y, la más implicada, la empresa francesa Sogetran, que por sí sola transportó un tercio del total del petróleo enviado al Sáhara Occidental.
En cuanto al gas, la exportación total al Sáhara Occidental en forma de GLP la lidera principalmente los Países Bajos, que es el mayor proveedor de gas, pero también los Estados Unidos, Francia, Croacia, España, Bélgica, Italia y la República Democrática del Congo. El gas importado se utiliza para apoyar la infraestructura y las industrias de la ocupación ilegal del Sáhara Occidental. Las principales empresas involucradas en el transporte son: BW Epic Kosan, filial del gigante BW Group, una multinacional noruega especializada en el transporte marítimo de hidrocarburos, Wisdom Marine Group que es empresa taiwanesa, y Stealth Corp, una naviera griega.
La electricidad es otro de los elementos más esenciales en la economía colonial y clave para sus operaciones militares en desierto abierto y remoto. Marruecos, que se presenta internacionalmente como un campeón en materia de energías renovables pese a que solo el 8% de su consumo total es limpio, está en proceso de instalar un gran proyecto energético en las tierras ocupadas del Sáhara Occidental. Es decir, el mantra de la energía renovable solo es posible manteniendo la ocupación. Y es Nareva, la empresa de energía eólica propiedad del holding Al-Mada (antiguamente SNI) perteneciente a la familia real marroquí, la propietaria de los grandes parques eólicos. Estos parques eólicos incluyen Tarfaya, con una capacidad instalada de 300 MW, y Aftissat, ubicado a 50 km al sur de la ciudad de Bojador ocupado, con una capacidad de 200 MW.
También está el parque Foum El Oued, uno de los primeros parques eólicos puestos en marcha por Nareva cerca de El Aaiún con una capacidad para 50,6 MW. En la construcción de parques eólicos participan varias empresas extranjeras, siendo las más importantes GE Renewable Energy, filial de la gigante estadounidense General Electric, así como la británica Windhoist, la estatal italiana Enel y la germano-española Siemens Gamesa. Todos estos parques eólicos están gestionados por EEM (Energie Eolienne du Maroc), que a su vez pertenece a Nareva. Toda esta energía generada es utilizada por las industrias que saquean los recursos no renovables del territorio saharaui y brindan oportunidades de empleo atrayendo a más colonos de Marruecos. Además, fue Alcatel Submarine Networks, filial francesa de la multinacional Nokia, la que tendió los cables de telecomunicaciones desde Dajla ocupada hasta el fondo marino.
Impactos internacionales y regionales del conflicto del Sáhara Occidental
La electricidad producida también podría exportarse al extranjero, en particular a la Unión Europea, que la necesita con urgencia dada la incompetencia de los líderes europeos sujetos al dictado de Bruselas emitido desde Washington. Tanto Reino Unido como España y Francia apoyan a Marruecos en esta aventura de exportación de energía verde manchada de sangre saharaui.
Producto de su invasión, Marruecos cuenta con el potencial solar del Sáhara Occidental. Para ello, están operativas dos plantas de energía solar fotovoltaica llamadas »Noor» con una capacidad combinada de 100 MW. Una con capacidad para 80 MW en la capital El Aaiún y otra de 20 MW en Bojador, que fueron construidas como parte de proyecto NOOR PV I, llevado a cabo por un consorcio liderado por ACWA Power (Arabia Saudita), en asociación con Shapoorji Palloni (India), Chint Group (China), Sterling & Wilson (India) y Astroenergy (filial de Chint Group).
El cemento también es crucial para la construcción, ya sea para uso gubernamental, militar o civil. Tan solo en El Aaiún ocupado están asentadas tres fábricas de cemento: La alemana HeidelbergCement –la mayor productora de cemento alemán, clasificada como el 2º grupo cementero más grande, y ejerce su control sobre las empresas CIMAR (Ciments du Maroc) y CIMSUD (filial del grupo Anouar Invest). Esta última unidad tiene una capacidad de producción de 500.000 toneladas anuales y fue construida por otra empresa alemana, ThyssenKrupp. La multinacional franco-suiza LafargeHolcim también líder en el mercado cementero mundial posee una unidad de trituración de 200.000 toneladas al año. El clinker, sustancia que se usa para elaborar el cemento, procede de Portugal.
Agricultura y pesca: Los mercados más sólidos.
Dajla, la antigua Villacisneros, es principal proveedor de productos del mar a nivel nacional e incluso en varios mercados extranjeros, incluida la UE. Los puertos de la capital administrativa El Aaiún y el de la capital económica, Dajla, están gestionados por la Société d’exploitation des ports SA (Marsa Maroc), que es propiedad del Májzen marroquí en un 60% y cotiza en la Bolsa de Valores de Casablanca.
Grandes cantidades de productos pesqueros se transportan en camiones cuya propiedad se oculta o encubre cuidadosamente en viajes de ida y vuelta entre los puertos de Dajla y El Aaiún hacia los puertos de Marruecos y Mauritania. Flotas enteras se utilizan para exportar fosfatos, arena, harina y aceite de pescado, así como pescado congelado y productos agrícolas. Hallamos por ejemplo la francesa CMA CGM, especializada en el transporte marítimo en contenedores con base en Marsella, que sirve en particular al puerto de Dajla y permite la exportación de pescado congelado a Europa.
El rey de Marruecos también ha intensificado la agricultura mediante la realización de concursos públicos destinados a atraer nuevos colonos para cultivar en las tierras saharauis. Marruecos es el primer exportador, fuera del continente europeo, que abastece de tomates saharauis al mercado de la Comunidad Europea. Así, los productos saharauis de hortalizas en general y tomates en particular exportados ilegalmente a la UE seguirán aumentado pese a la sentencia del TJUE que anuló los acuerdos UE-Marruecos por considerar que el Sáhara Occidental no pertenecía a Marruecos.
La brecha ilegal de El Guerguerat en el sur de los territorios saharauis ocupados canaliza gran parte de las hortalizas saharauis en camiones a través del paso que conecta con Mauritania. Es igualmente importante señalar que la operatividad y libre tráfico de este paso fronterizo producto del expansionismo por la fuerza militar ha sido posible mediante la inexplicable complicidad de las autoridades mauritanas, que pese a que reconocen la República Saharaui, violan su integridad territorial con impunidad pasmosa en un acto que echa por tierra su supuesta neutralidad meramente declaratoria.
La brecha ilegal de El Guerguerat y sus implicaciones estratégicas
Geográficamente, Marruecos se encuentra aislado del África Occidental por sus dos rivales, Argelia al este, que mantiene cerrada sus fronteras compartidas, y la República Saharaui al sur, que mantiene ocupada militarmente, por lo que carece de ningún paso o conexión terrestre hacia dicha región. En el contexto de la ocupación, El Guerguerat era estratégica para los saharauis, hasta 2020, porque era la única salida al Atlántico y hacia la ciudad fantasma de La Güera, así como por la cercanía con la capital económica de Mauritania, Nuadibú. En tanto es así, la ilegal anexión marroquí con la posterior construcción de un nuevo muro y bases militares en El Guerguerat tiene un significado eminentemente económico; Otorga a Marruecos el anhelado acceso al mercado del CEDEAO del que ya forma parte su gran rival, Argelia, que sí comparte frontera natural con Mauritania y poseen ruta terrestre. Rabat es consciente de que el acceso al mercado del CEDEAO solo puede ser posible anexándose la brecha ilegal de El Guerguerat, paso fronterizo que conecta con Mauritania a través del punto PK-55, que se encuentra en el extremo sur de los territorios de la República Saharaui, por tanto es la única vía del territorio que le permitiría comercializar sus productos con los países del África Occidental y del Sahel, y competir así con las rutas argelino-mauritanas como Tinduf-Zuérat y Nuakchott-Uargla.
Se trata de la única carretera terrestre que conecta Marruecos a través de la República Saharaui y Mauritania con las profundidades del África Occidental, evitando además grandes costes en transportes marítimos al facilitar una ruta terrestre directa desde el puerto mediterráneo de Tánger hasta Dakar. Rabat logra sortear así su encapsulamiento geográfico por décadas y refuerza su ocupación del Sáhara Occidental al convertir la brecha de El Guerguerat en condición indispensable y razón de existencia de dicha ruta.
Actualmente, del paso fronterizo ilegal de El Guerguerat depende gran parte del comercio UE-África ya que Marruecos es el principal socio comercial de la UE en la región norteafricana, además mantiene a Nuakchott dependiente de la ruta por la gran exportación de hortalizas, insumos de primera necesidad y material electrónico que recibe. En el mismo sentido, para mantener a Mauritania alejada de cualquier posicionamiento a favor de la República Saharaui, amenaza continuamente con invadir La Güera con la finalidad de construir un puerto marítimo que haga competencia al puerto de Nuadibú, ciudad mauritana portuaria de mayor actividad. Marruecos, en sus ambiciones expansionistas, persigue hacerse con el control de gran parte de la zona marítima del Atlántico oriental.
Economía marroquí y ruptura con la ocupación saharaui.
¿Qué peso tiene Marruecos en el escenario mundial? Lo vemos reflejado en los microestados y monarquías del Golfo conservadoras que abrieron consulados en los territorios ocupados. Si en el mundo capitalista, la potencia y peso de los países se mide por su PIB, Marruecos, deficiente en recursos naturales, gran parte de su riqueza proviene del saqueo sistemático de los recursos naturales saharauis, y la otra parte de su «agricultura» norteña centrada en la producción de sustancias ilícitas y el consiguiente tráfico a escala mundial, en particular hacia Europa y Latinoamérica, el «turismo» sexual practicado a escala industrial en conocidos hoteles, el chantaje con la inmigración para la obtención de las subvenciones europeas que se le asignan desde décadas para, supuestamente, vigilar e impedir la entrada de inmigrantes en Europa, y que por alguna extraña razón no cesa.
Como se puede apreciar, para Marruecos es económicamente ineficiente hacer la guerra; El mantenimiento del statu quo en las regiones anexadas revierte en beneficios millonarios a los que es difícil renunciar voluntariamente, además mantiene tres cuartas partes de su ejército en la región que ocupa con los correspondientes gastos de transporte y mantenimiento, sus acciones se limitan a esporádicos ataque con drones diez veces más costosos que el objetivo atacado. Como mucho, se prevén algunas operaciones especiales puntuales para reforzar su presencia en el territorio y disuadir.
Los ingresos de Marruecos por la exportación de recursos naturales saharauis siguen constituyendo un importante superávit financiero que supera las necesidades de su ejército, asegura la compra de armamento y refuerza la maquinaria militar dirigida a la guerra contra el pueblo saharaui para consolidar la prolongación de sus actividades ilícitas y el posterior desgaste del Polisario, sin mencionar el enriquecimiento de sus generales que los mantiene distraídos de los golpes militares.
Habrá entonces que generar las condiciones favorables para la insostenibilidad del mantenimiento de su presencia militar a través de la generación de costes, poniendo de esta manera en jaque a su »economía de colonización», revertir la rentabilidad económica que ofrece la ocupación en la medida en que ésta se ha convertido en el núcleo esencial de su permanencia ilegal. El ELPS podrá cambiar las reglas del juego si golpea enclaves y emplazamientos cruciales de la columna vertebral económica como ya hizo durante la primera guerra.
El futuro de toda guerra es un tratado de paz, y el primero de las partes contendientes que hable de dicho tratado es el que está más exhausto de proseguir la guerra, bien porque el perjuicio es mayor aún saliendo victorioso, o bien por la insostenibilidad de la misma ante el elevado número de problemas que genera para los estados, muy en particular sobre su economía. Hassán II ya lo comprobó.
En vista de la macabra burla diplomática y el más que justificado mutismo del régimen marroquí sobre un conflicto que tiene perdido y que no quiere remover demasiado, solamente una escalada bélica podrá hacerlo claudicar para que vuelva a mirar hacia su interior y reoriente sus energías hacia la construcción de su sueño de grandeza dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas.
Guerra del Sáhara Occidental | El Frente POLISARIO multiplica los ataques con misiles a Marruecos
Los bombardeos del ejército saharaui en Mahbes ocasionaron daños en tres bases del ejército de ocupación marroquí.
Bir Lehlu (ECS)-. Según ha informado este viernes la Dirección Central del Comisariado Político del Ejército Saharaui, unidades del Ejército Popular de Liberación Saharaui (ELPS) han lanzado en la noche del jueves un intenso y continuo ataque a la sede del 65º Batallón marroquí en la zona de Laagad, en el sector de Mahbes, causando bajas mortales en las filas del ejército marroquí, informa SPS.
El ejército saharaui exhibe sus primeros drones de ataque que usará en el Sáhara Occidental
El comunicado del ejército saharaui añade que sus unidades bombardearon asimismo la 19ª base militar marroquí ubicada en la zona de Beirat Tenuchad, también en el sector de Mahbes, al norte del Sáhara Occidental.
En el marco de la misma ofensiva, la artillería saharaui ha efectuado también en la madrugada de este viernes un ataque con misiles contra bases del ejército de ocupación marroquí en la misma ciudad de Mahbes. Así, la defensa saharaui agrega que el ejército saharaui ejecutó otros ataques a posiciones de retaguardia del 40. º Batallón situado en la zona de Cheidmiya en el sector de Mahbes.
Marruecos declara zona militar cerrada el sureste del Sáhara Occidental y expulsa a los civiles