✍️ Germán Gorraiz López- Analista
Las negociaciones secretas entre Putin y Trump habrían alcanzado un acuerdo para un intercambio de cromos de Siria por Ucrania que incluiría el sacrificio de Assad y Zelenski. Así, Assad es defenestrado mediante un golpe de Estado dirigido por los yihadistas, al menos 15 facciones apoyadas y entrenadas por EE.UU y Turquía. Assad pidió asilo en Moscú, como era de esperar.
El presidente sirio y su familia llegan a Rusia bajo condición de asilados por «motivos humanitarios»
El caos constructivo de EE.UU
La Doctrina Carter inspirada por Brzezinski (1980), tenía como objetivo la implementación en Oriente Próximo y Medio del llamado “caos constructivo”, concepto que se basaría en la máxima atribuida al emperador romano Julio César “divide et impera”, para lograr la instauración de un campo de inestabilidad y violencia en la zona (balcanización) y originar un caos que se extendería desde Líbano, Palestina y Siria a Iraq y desde Irán y Afganistán hasta Pakistán y Anatolia (Asia Menor).
Así, el ex-presidente de Egipto, Hosni Mubarak, (derrocado por su negativa a la instalación de bases norteamericanas en suelo egipcio), reveló en una entrevista al diario egipcio El-Fagr la existencia del presunto plan para dividir a toda la región de Medio Oriente, consistente en la instauración del citado “caos constructivo” mediante la sucesiva destrucción de los regímenes autocráticos de Irak, Libia, Sudán, Siria e Irán y reservando para Jordania el rol de “nueva patria del pueblo palestino”.
Ataque sorpresa coordinado por Turquía, Israel y EE.UU
Aprovechando la visita oficial de Al Assad a Moscú y que el viernes es festivo en Siria, los grupos yihadistas teledirigidos por EEUU, Turquía e Israel desencadenaron una ofensiva relámpago, entrando en Alepo, la segunda ciudad más grande del país, según reportó en su momento el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR, por sus siglas en inglés).
Hayat Tahrir al Sham (HTS) es el grupo más destacado que participó en la actual ofensiva contra el gobierno de Assad. El grupo está dirigido por Abu Mohammed al Julani y controla la mayor parte de la provincia de Idlib, y estaría teledirigido por un Israel interesado en la formación de un Califato islámico con capital en Alepo. Asimismo, en el ataque sorpresa tomaron parte fuerzas del Frente de Liberación Nacional, grupo respaldado por un Erdogan obsesionado con fagocitar el Estado kurdo-sirio de Rojava.
A pesar de que Estados Unidos se ha desvinculado de esta nueva batalla tras afirmar que “no tiene nada que ver con esta ofensiva, dirigida por Hayat Tahrir al-Sham», el objetivo inicial del Pentágono sería abrir un nuevo frente contra Rusia que le obligue a distraer fuerzas aéreas de Ucrania y así ralentizar su contraofensiva en Kursk y en el Donbas.
Golpe de mano contra Assad?
Las negociaciones secretas entre Putin y Trump han alcanzado un acuerdo para un intercambio de cromos de Siria por Ucrania que incluiría el sacrificio de Assad y Zelenski. Así, la imparable ofensiva yihadista habría ocupado asimismo Hama, Homs y Damasco, la llave para acceder al poder en el país mientras circularían ya rumores de un acuerdo entre las potencias y otros actores interesados, lo que obligó a Assad a exiliarse en Rusia.
Tras ello, asistiremos al diseño de la nueva cartografia fruto de la partición de Siria en cuatro partes. Así tendremos la Siria con capital en Damasco, protectorado ruso que incluirá la base naval en el puerto sirio de Tartus ; la franja turco-siria del FLN tutelado por Erdogan; el Kurdistán sirio o Rojava, tutelado por EE.UU y el nuevo Califato de Alepo del HDS, teledirigida por Israel.
Por su parte, Trump sacrificará a un Zelenski que será acusado de corrupción y obligado a exiliarse, mientras se procede posteriormente a la firma de un Acuerdo de Paz con Rusia, lo que convertirá a Assad y Zelenski en las primeras víctimas colaterales de la guerra fría 2.0.