La firma danesa GreenGo Energy tiene la ambición de producir hidrógeno verde en el territorio del Sáhara Occidental, ocupado ilegalmente por Marruecos desde 1975. Los saharauis denuncian que la actividad de GreenGo Energy “contribuye al objeto que persigue Marruecos de legitimar la ocupación ilegal”.
Agencias
Madrid (ECS).- La empresa danesa GreenGo Energy ha abierto una oficina en Marruecos. Pero si se examina detenidamente el panorama general, se ve que la oficina está en Dajla (Villa Cisneros) y, según la ONU, la UE y Dinamarca, esta ciudad no está en Marruecos, sino en el territorio ocupado del Sáhara Occidental. De esta manera, GreenGo Energy entra en uno de los conflictos más largos y delicados de África. Desde 1975, el Sáhara Occidental está ocupado por Marruecos.
En 1991, la ONU consiguió un alto el fuego entre Marruecos y el Frente Polisario para celebrar un referéndum que podría decidir el futuro del Sáhara Occidental, pero 33 años después el referéndum nunca se ha celebrado y, por tanto, el estatus de la región sigue en disputa. Pero ni la ONU, la UE ni Dinamarca reconocen la soberanía de Rabat sobre la zona.
Por ello, según informó Danwatch, la actividad GreenGo Energy en el Sáhara Occidental “contribuye al objeto que persigue Marruecos de legitimar la ocupación ilegal”. GreenGo Energy afirma que tiene una oficina en Marruecos, pero no es así. «Tiene su oficina en el territorio ocupado del Sáhara Occidental», denuncia Erik Hagen de la ONG Western Sahara Resource Watch.
El ex funcionario de la ONU, el danés Kurt Mosgaard, que fue jefe de la MINURSO, la misión de la ONU para el Referéndum en el Sáhara Occidental, de 2005 a 2007, califica la apertura de una oficina de GreenGo Energy en Dajla como un «reconocimiento indirecto» de la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.
«Socavan la capacidad de la ONU para negociar una solución pacífica y justa al conflicto. Corresponde a una empresa danesa que abre una oficina en una de las zonas ocupadas por Rusia en Ucrania”, ironiza Mosgaard.
GreenGo Energy abrió su oficina en Dajla ocupada a principios de este año, y en un correo electrónico enviado al periódico danés Danwatch, la gerente de comunicaciones Christina Bregndahl Jørgensen explica que Dajla «es conocida por su entorno altamente propicio para recursos eólicos y solares, lo que hace que la región sea ideal para la producción de hidrógeno verdad como el e-mentanol y el amoníaco verde”
Según Kurt Mosgaard, tiene un gran valor diplomático para Marruecos que GreenGo Energy haya abierto una oficina en Dajla.
«Marruecos está intentando deliberadamente atraer inversiones extranjeras al Sáhara Occidental para consolidar su ocupación sobre la zona y ganar una simbólica legitimidad internacional», agrega.
Ya en 2002, los abogados de la ONU determinaron que todas las actividades comerciales en el Sáhara Occidental requieren el consentimiento explícito del pueblo saharaui y deben ser en su beneficio.
Y en 2016, el Parlamento noruego decidió que las empresas danesas deben «tener especial cuidado» al operar en el Sáhara Occidental y garantizar que sus actividades comerciales no perjudiquen al pueblo saharaui.
Más recientemente, el Tribunal de Justicia Europeo (TUE) declaró inválido el acuerdo comercial de la UE con Marruecos, porque el acuerdo viola el derecho del pueblo del Sáhara Occidental a la autodeterminación.
“Seguimos las normas para la participación de las partes interesadas. Como empresa privada, no debemos participar ni intervenir en ninguna negociación de paz. Observamos que el Parlamento danés ha expresado su apoyo a un proceso de paz en la región», afirma por su parte la directora de comunicación de GreenGo Energy, Christina Jørgensen.
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